sábado, 9 de mayo de 2009

EL BUITRE (PARQUE NATURAL DE CASTRIL). UN CLÁSICO DE NUESTRO CLUB

Amanece un día nublado en Campo Cebas donde alquilamos un par de 4x4 para que nos hagan un tramo del Barranco del Gallinero. Al dejar los vehículos echamos a andar por una ascensión que por momentos se hace exigente. Durante la subida nos sorprende la cantidad de caminos a derecha e izquierda que pueden llevar a un buen vehículo de montaña hasta los 1800 m de altitud cuando menos.


Antes de llegar a los Prados del Buitre, por la zona de la "Pinaílla", encontramos algunos ejemplares de pino a los que habría que tratar de "usted", pasando después por varias zonas de torcales mientras ascendemos por la loma de "Enmedio", que divide el Barranco del "Gallinero", que evacúa hacia la "Bolera", de la vertiente que muere en el Río Castril.
Pasados los Prados del "Buitre" y el refugio del mismo nombre iniciamos la ascensión final hasta el Pico del "Buitre" (2020m). Desde aquí, las vistas son magníficas y más si nos encontramos con unos compañeros habituales de nuestras excursiones, los buitres leonados.


Iniciamos un largo descenso, no sin antes parar en la piedra de las ventanas, como es lógico a hacernos un reportaje fotográfico. En este descenso encontramos la nota triste de la excursión: una plaga de procesionaria está acabando con el, hasta hace poco, frondoso bosque de pinos, convirtiéndolo en un espacio tenebroso, digno de alguna que otra "peli" de terror, a lo que contribuyen los numerosos líquenes que aún cuelgan de sus ramas, poco pobladas de acículas devoradas por dicha plaga.






Paramos un segundo por una molestias en el pié de Lidia (por cierto tengo que ir presentando a los compañeros de reparto de esta peli. Bueno a lo largo de nuestras excursiones los iréis conociendo). Se oye el rumor del agua. Nos asomamos, y cual es nuestra sorpresa, aparece ante nosotros un arroyuelo con cascada incluida. Os puedo asegurar que no es, ni por poco, la primera vez que vengo al Buitre, pero siempre hay alguna sorpresa por descubrir.





Al fin, hemos de correr, pues nos sorprende un tormentón indescriptible: viento, agua y granizo en cantidades asombrosas...

PD. EL BELÉN DE J.K.: En la misma cumbre encontramos una casita de madera, de estas que ponemos en nuestra casa por Navidad. Nos intriga tanto que buscando damos con algunas figuritas esparcidas por la cumbre, no todas (virgen, niño y borreguito). Nos las hemos traído a Huéscar con la intención de volver la próxima Navidad a colocar un nuevo portalillo. Si alguien desea conocer más datos al respecto rogamos se ponga en contacto con nuestro Club.


1 comentario:

Jesús K. dijo...

Este hallazgo del portalillo tiene que ver con las coordenadas que encontramos anotadas y a buen recaudo muy cerca de la cima.